Te compartó...

Ese amor que de niños,

creemos somos el centro del universo de papá

en cierta forma, lo somos.

Y vivimos y vivimos..

pasan los días, las semanas, los meses y los años,

Vamos entendiendo y comprendiendo, el por que de los malestares de mamá

las lagrimas que de sus ojos corren,

de las molestias que muchas veces nos preguntams..¿Porque? . . .

y que de ninguno de ellos, explica nada....

Y la noticia se va dando, con platicas familiares...

- Saldre, ire a ver, aquellos.

- ¿Aquellos?...

- ¿Quienes son aquellos? . . .

Una respuesta, fria y corta,

- Sus hijos.

Hasta que un día

esta historia tiene un desenlace...

Comprendible.. quizas en cierta parte...

Se buscaran mil escusas para que no cambie nuestro punto de vista de papá.

al final, se entiende, esos miles de porques...

esas lagrimas, esos tantos....

Lo unico que perdurara, seran esos buenos mometos, de juegos, risas, aprendizaje y convivencia..

Surgiran tambien, reproches.. muchos,

con el paso de los años, se entendera que en la juventud, se hacen mil cosas,sin pensar en el futuro.

Aun asi, Papá no dejara de ser papá.

Y pesa mucho mas, los buenos momentos, que aquella desilución.